ACTUALIDAD DE “LA METAMORFOSIS”

La primera percepción que he tenido, al releer “La metamorfosis” de Franz Kafka, es encontrarme ante una novela muy actual, tanto por su contenido como por el estilo en el que está escrita. Parece como si los casi cien años transcurridos desde su publicación, en 1916, no hubieran pasado por ella.

La situación inverosímil en la que se encuentra el protagonista que, en un principio, le desconcierta y nos desconcierta es aceptada, poco a poco, tanto por él mismo, como por nosotros, los lectores:

“La comida muy pronto dejó de producirle la menor alegría, y así fue tomando, para distraerse, la costumbre de trepar zigzagueando por las paredes y el techo…”

Las reflexiones de Gregorio Samsa sobre su trabajo alienante, las insidias del gerente de la empresa, echándole en cara su escaso rendimiento, nos llevan a entender que su transformación en un monstruoso insecto es una forma de expresar la frustración que siente. Es una metáfora empleada por Kafka para dar rienda suelta a todo el malestar acumulado, en su trabajo rutinario y aburrido, que le provocaba insomnio, como el del propio protagonista, y que representa a un mundo laboral, en el que el interés de la empresa está muy por encima del de los trabajadores.

No han cambiado tanto los tiempos, desde que se publicó esta novela: en la actualidad, las medidas que han tomado los gobiernos de los países de nuestro entorno están mermando, gradualmente, los derechos adquiridos de los trabajadores: hay más facilidad para el despido, se está retrasando la edad de jubilación, se han reducido los sueldos de los funcionarios, etc.

En cuanto a la forma en que está escrita, la sencillez del léxico y la simplicidad de la sintaxis contribuyen a que la historia sea creíble, porque no hay adornos, que entretengan al lector, sólo la metamorfosis, la inconcebible transformación de Gregorio Samsa en un monstruoso insecto centran toda nuestra atención; un insecto, que trepa por las paredes de nuestra imaginación, hasta convertirse en algo normal, porque, en realidad, a quien estamos viendo es a un pobre hombre, que se ve obligado a desempeñar un trabajo, que no le realiza como persona, y a vivir con una familia, donde predomina el interés material, por encima del afecto.

En este sentido alegórico, por sus indiscutibles rasgos precursores, “La metamorfosis” de Kafka no es sólo una obra maestra del siglo XX, sino de la literatura universal.

4 pensamientos en “ACTUALIDAD DE “LA METAMORFOSIS”

  1. La verdad esque tuve que le leer la metamorfosis varias veces para sacar todo el contenido intrínseco que posee,y puede que aún me queden cosas por descubrir,sin embargo una de las cosas que me impactó del libro,es quizás el conformismo del protagonista.
    Él asume su situación casi desde primera hora y no se plantea el porqué como hubiéramos hecho cualquiera,el quería seguir con su vida normal,porque para el su vida era todo,en parte gracias a la presión de la familia por pagar las deudas y por otra parte también a la falta de deseo de su personaje por cambiar su suerte.
    Su vida era monótona,tan aburrida y gris que asusta,todos los días eran iguales para él y no conocía otra cosa,pero para él y su familia debía de ser así.
    ¿Es esto quizás una metáfora de nuestra vida,nos conformamos siempre con lo mismo?A salir el viernes,descansar el sábado,el partido del domingo…creo que Kafka quiso hacernos reflexionar con esto.
    El personaje se abandona así mismo cuando descubre que su función familiar al fin y al cabo era prescindible,y la desagradecida familia al final solo puede ver el aspecto exterior.
    Sin amor,amistad, y esas cosas que despiertan a la esencia humana,esta esencia misma se pierde,y al final se convierte en lo que asumió desde primera hora,un monstruo,con el final propio de los de su especie.

  2. Creo que tienes razón: Kafka, a través de la metáfora de la metamorfosis y su aceptación por parte del protagonista, quiere hacernos reflexionar sobre el tipo de vida alienante y rutinaria, propia del sistema capitalista.

  3. Hombre,no me queda tan claro que sea algo propio del sistema capitalista,sino mas bien del estilo de vida al que nos hemos conformado,es más creo que el comunismo es un sistema con muchas mas ataduras sin embargo los ciudadanos no tienen mas opción a ello…nosotros que tenemos las posibilidad de reaccionar,podemos y debemos hacerlo…

  4. Me refería a la intencionalidad de Kafa, cuando escribió esta novela, que fue antes de producirse la revolución de octubre, en Rusia, en 1917, y que dio lugar al primer régimen comunista. Pero leída, en la actualidad, con la información que poseemos sobre la URSS y el resto de países comunistas, también podría aplicarse a estos.

    Sucede lo mismo con «Rebelión en la granja», que fue escrita por Orwell como una parábola del mundo comunista; pero también lleva implícita una crítica al sistema capitalista, donde prima el interés personal sobre el colectivo.

    Esta es una de las características de la literatura: su plurisignificación y la libertad de interpretación del lector.

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