En medio de tanto fuego de artificio del cine actual, conmueve esta pelÃcula tan humana, en la que tres mujeres detectives que están acostumbradas a inmiscuirse en los problemas de los demás, no están preparadas en cambio para afrontar los suyos propios. En efecto, se entrelazan lo personal y lo profesional y es justamente el equilibrio entre estas dos facetas de la vida uno de los aciertos de â??Mataharisâ?. El proceso de entrecruzamiento es lo suficientemente lento como para que se establezcan las conexiones con naturalidad y, durante el mismo, afloran problemas tan habituales de la pareja como: la incomunicación que va minando la relación; la desconfianza motivada por la falta de sinceridad; y el complejo de culpa, cuando se antepone la vida profesional a la personal. Los desenlaces de las tres historias son tan diversos como la propia vida de pareja: la separación, el reencuentro y la incertidumbre.
En la presentación de â??Mataharisâ? en el Festival de San Sebastián, su directora, Iciar BollaÃn, dijo que como espectadora de cine se sentÃa interesada por ver a mujeres trabajando y luchando por salir adelante, haciendo frente al desamor, la incomunicación, los dilemas éticos y el desgaste emocional. Es el mejor resumen que se puede hacer de la pelÃcula y, a la vez, el mejor reclamo para verla.